Arame y Bougna, madres de Lamine e Issa, clandestinos que han partido hacia Europa, no cuentan ya sus primaveras. Cada una de ellas es centinela devota y consagrada a la salvaguarda de los suyos, el pilar que sustenta la morada sobre las galerías excavadas por la ausencia. Coumba y Daba, jóvenes esposas de ambos emigrantes, olisquean sus primeras rosas: sedientas de amor, de porvenir y de modernidad, se lanzan, sin reservas, por una pista de felicidad que se convierte, poco a poco, en su vía crucis.
La “novela de dictador” más lograda de la literatura africana. Una obra en la que lo fantástico se une a la denuncia política. Una sátira de primera magnitud de la opresión congoleña (una opresión de la que el mismo Labou Tansi terminó por ser víctima).
"¿Acaso no soy yo una mujer?", preguntaba la activista negra Sojourner Truth a sus compatriotas norteamericanas. Desde los años sesenta del siglo XX, Ama Ata Aidoo lleva interpelando por igual a las mujeres y a los hombres, a l@s blanc@s y a l@s negr@s, con su obra y con su vida. Desde la implacable mirada de Nuestra hermana aguafiestas sobre Europa, Aidoo revienta nuestras certezas, socava nuestro buenismo autocomplaciente, mina nuestras excusas para no afrontar los discursos y los efectos del poder en un mundo global construido sobre la injusticia y la desigualdad.
La escritora camerunesa aborda un tema incómoda: el de la trata negrera, y lo aborda, no desde el punto de vista de los que fueron llevados a América, sino de los traumas que causó a los que se quedaron en África, unos traumas que no han sido todavía suficientemente abordados.
El antipueblo es una novela truculenta, esperpéntica, una sátira político-social feroz que nos relata la historia de Dadú, esposo y padre modelo, funcionario íntegro, director adjunto de la Escuela Normal de Maestras de Kinshasa, un ciudadano ejemplar del Zaire al que los encantos de Yavelde, una de sus jóvenes estudiantes, ponen a prueba. ¿Cómo se resiste a la tentación, en Kinshasa o en cualquier parte?...
"¡Los negros nunca irán al paraíso!' La negación absoluta planeaba en la expresión. Así, la exclamación del desconocido me alentó a seguir adelante en mi investigación sobre los clichés que no dan ya risa a nadie. A la espera de un improbable avión, había yo recogido, sin evaluar toda su importancia, esa frase clave a mi alcance, capaz de abrir mi vida cosida con mil interferencias, de devolverme la memoria no perdida aún, sólo adormecida.
Uno de los grandes clásicos de la literatura congoleña y africana. Mankuku, el protagonista de la obra, vivirá el período precolonial, la llegada de los colonizadores y la eclosión de las indepedencias. Y a través de este personaje, Dongala se pregunta por el valor de los antiguos y los nuevos conocimientos.
Primera traducción al español de la Historia de la literatura negro-africana, obra de referencia de Lylian Kesteloot, una de las grandes expertas en el tema. Este libro aborda la historia de la literatura africana escrita contemporánea, que nació a principios de los años 30 del siglo XX con la creación del movimiento de la Negritud (Senghor -Senegal-; Césaire -Martinica-; Damas -Guayana-), así como el estudio de sus antecedentes, entre ellos la literatura negroamericana de los poetas del Renacimiento de Harlem, en los años veinte.
Sudáfrica es quizá el país de África con una tradición literaria más sólida. Sus dos premios Nobel (Nadine Gordimer y JM Coetzee) han conseguido hacer llegar su voz a todo el mundo. Pero la literatura de este país es mucho más rica: negros, mestizos, asiáticos y blancos se han sumado a corrientes literarias de tipo muy diverso. Entre todos ellos destaca, por su genial estilo y por su compromiso personal, Achmat Dangor (Sudáfrica, 1948), presidente de la Fundación Nelson Mandela. Trilogía de Z Town es la gran novela sobre el Apartheid.
Mia Couto (1955) es el escritor mozambiqueño más conocido internacionalmente. En esta su última novela se alternan dos líneas argumentales, a su vez integradas por pequeñas historias que se entrelazan, como en un juego de esas cajas africanas (y chinas) de madera tallada que contienen otras menores. En toda su obra de ficción Mia Couto juega con el lenguaje y crea neologismos, altera la sintaxis, se sirve de la tradición oral y de los proverbios. Habla de Mozambique, de África, de la identidad, de la memoria y la amnesia colectiva.