El empleado del Centro Cultural francés en Kigali -capital de Ruanda-, Vénuste Kayimahe, logró sobrevivir al genocidio tutsi testificando en favor de éstos. Este documental está basado en su propio libroque describe la ruta de un ruandés de 50 años ahora, y que desde la independencia de Ruanda no ha vuelto a su país.