La evidencia creciente de que los Estados europeos violan el derecho internacional y emplean la violencia contra las personas migrantes no ha frenado las políticas de externalización y securitización de las fronteras
En los pasillos de la base militar de Ouallam, no lejos de la frontera con Mali, los legionarios franceses vestidos con kepis blancos se mezclan con los soldados nigerinos