En 2050 seremos 11.200 millones de habitantes en el mundo y el 40% de la población será africana, condicionando el orden político y económico global. Así, en África las políticas demográficas cobran relevancia para el aprovechamiento de oportunidades como la creciente inversión extranjera o el aumento de la clase media. La gran influencia que tienen la fecundidad, la mortalidad y la migración en el desarrollo social y económico se hace evidente cuando se analiza la demografía social y política de un país concreto, en este caso, Angola. Pedro Reques y Luiekakio Afonso retratan aquí el gigantesco mosaico de problemas que se dan en el continente, pero también reflejan el gran espacio de oportunidades que se abre para el futuro de África.