El festival internacional de las artes de Harare es un baluarte de los festivales de música africanos, que resiste desde 1999 a pesar de los desafíos que ha tenido que encarar Zimbabue. El HIFA tiene ese espíritu de orgullo, energía y creatividad que derriba fronteras, desafía estereotipos y se rebela celebrando las artes. Suele durar unos seis días entre los meses de abril y mayo. Es uno de los más grandes festivales de África y aglutina teatro, música, danza y artes plásticas. Aquí se puede escuchar afrobeat, funk, jazz, soul, ópera o música clásica y cuenta con la colaboración de artistas locales.
AfrikaBurn es un encuentro en la línea del Burning Man de Nevada. Tiene lugar en la semidesértica provincia de Cabo del Norte y lo que allí ocurre no traspasa las fronteras temporales del festival, pues la ciudad virtual que se crea durante el encuentro, Tankwa Town, desaparece al terminar sin dejar rastro. El festival crea un espacio de autosuficiencia, sin dinero, de congregación comunitaria donde celebrar la expresión pura en todo su color, actitud y liberación. La flexibilidad del encuentro permite que seas parte del público o del espectáculo. AfrikaBurn es una experiencia de expresión y auto descubrimiento. Comunidad, inclusión y participación es lo que guía al festival. Cuanto más das, más te llevas. Un festival altamente recomendado para aventureros, inconformistas y almas creativas.
Se trata del mayor festival de música de África del Este y tiene lugar durante el mes de febrero en los viejos fuertes, anfiteatros y edificios históricos de la Ciudad de Piedra, Zanzíbar. Sauti za Busara significa “Sonidos de sabiduría” y combina su plantel de artistas con múltiples actividades paralelas. Zanzíbar ofrece durante los días del festival una vibrante y exótica comunión entre la arquitectura histórica y la música contemporánea, congregando audiencias de todos los rincones del globo.
El festival de jazz de Ciudad del Cabo es el 4º más grande del mundo y el mayor del continente para este estilo de música. Desde su primera edición en el año 2000, tiene lugar en el mes de marzo y atrae a miles de personas que se congregan durante dos días en torno al saxo, el piano, el bajo y la trompeta. Cinco escenarios que acogen a 40 artistas, la mitad de los cuales son sudafricanos, y el resto de todas partes del mundo. Si eres amante del jazz, no puedes perderte esta cita. Las entradas vuelan, así que apúntalo ya en tu agenda.